Domingo de Miercoles

Este domingo recibí un abrazo largo y prolongado en espera, en reserva y fuerza de quien espera un placebo para aplacar mas y mas furia ,

Ya que el Miércoles, este miércoles al regalarme llorar con mi padre pude desempolvar mi alegría reprimida por tanto tiempo de poder saber que mi País y mi bandera estará en la fiesta mas grande del fútbol mundial, no soy un incondicional nunca lo fui los años noventa se encargaron de exterminar mi pasión por ese deporte en el que a penas se desenvolverme a duras penas mas aun cada clasificación reprimía mas y mas este grito y esas lagrimas. ,

Aun no me lo creo del todo pero solo puedo agradecerle a ese equipo y a ese deporte por ver caras mas alegres, gente con mas amor por su condición de país tercermundista que aun sigue siendo machista , que aun despotrica que aun se sumerge en el fujimorismo retrogrado.

Pero, ahora la esperanza suena mas fuerte en cada sonrisa, (nunca vi tanta gente usar la camiseta en un solo espacio publico) en cada vestimenta de ver que sigue girando el planeta y ahora uno siente que ya es parte de ese giro tan natural que futbolisticamente siempre nos fue esquivo desde el 82.

En medio de ese abrazo de mi primo hermano había algo mas que alegría había unión de saber que ahora el Perú ya aparece en el mapa del fútbol como algo serio y que es posible que las cosas pasen de como deberían ser a como son

El abrazo fue el domingo previa promesa de alegría ese mismo miércoles Gracias Federación Peruana de Fútbol.

Escribo un Miércoles después para apaciguar la alegría de aquel miércoles 15 de noviembre del 2017.